Los barrotes de la prisión no
impidieron que pudiera acariciarla. Pasé años de insistente
soledad. La primera noche que apareció fue sublime. Era tal cual
como la venía imaginando desde siempre. Nos reconocimos sin límites.
A partir de entonces comencé a soñarla todas las noches. Era tan
real que se fundía en el lateral corazón de mi celda. Tan real que
quien diga que fue un sueño es un canalla y lo mato.
El humor me cambió ciento
ochenta grados. En el patio del pabellón no tardaron en hacerlo
notar. Maldigo el momento que narré mi contento, pero de no hacerlo
me hubiese ahogado de amor en ese pequeño cuarto. Muchos me trataron
de loco inverosímil y dolió muy hondo. Tal vez por causa de ello
fue que desabotoné la camisa y enseñé los rastros de sus uñas
clavadas en mi abdómen. Enseñé las pruebas irrefutables del amor.
Me dieron vuelta la cara como a un paria. Váyanse todos a cagar, les
grité por lo alto. Sólo el Gordo Altamirano abrió bien grandes sus
ojos y preguntó algunos detalles. Se los di sin temor a que pudiera
entenderlos. Se los di cuando quedamos solos en el patio del
pabellón.
No pasaron varias noches para
que ocurriera esto que me carcome por dentro. No vino a mi encuentro.
Pienso mil desastres que pudieron haberle ocurrido. Paso la peor de
las madrugadas. Inmerso en una espesa humedad, que es casi llanto,
veo salir el sol de resfilón por los barrotes. Llorando sin más veo
como la noche esfuma y de ella ni rastros.
Salgo al patio del pabellón a
esparcir mi bronca. No hablo con nadie. De pronto lo veo al Gordo
Altamirano. Está ahí, solo. Solo pero está muy alegre. Que raro el
Gordo alegre. Lo noto enseguida. Con los ojos llenos de peligrosa
felicidad. Me le acerco sigiloso. Por detrás y de costado. Parece
fuera de sí de tan alegre. Levanto su remera levemente y aparecen
rojo furioso, sobre los pliegues de su panza, los rasguños de mi
traición.
Muy interesante.
ResponderEliminarQuien sos...
EliminarMuy bueno!!!!
EliminarMe atrapa tu modo de escribir!! La presentacion de la situacion, sigilosa,que va haciendo entrar al lector pareciera que de a poco y en realidad es en forma instantanea a partir de las primeras líneas! Todo sorprende!